Hay días así

Días para gritar, días para callar. Se atiborran las emociones, los rencores y quieres gritarle al mundo que te lleva la rechingada madre porque gente noble, valiosa, que te dió tanto ya no está y en cambio la pinche gente que se la pasa jodiendo la vida a los demás aquí sigue, jodiendo la vida a los demás. Quiero gritarle al mundo pero está sordo, está indiferente. Al león 14 que deje de hacerse pendejo y mande a la chingada a los que se aprovechan de los creyentes para comprarse residencias, para comprarse silencios, para vender pedazos de cielo que nadie puede reclamar cuando se muera. Me queda callar el dolor que siento por esa amable mujer que durante la parte de su  vida que compartimos en el trabajo me regaló su sonrisa, su comprensión, su misericordia por los demás y me hizo entender que detrás de la reveldia de algunos estaba su grito que también tenían que callar. Le deseo que ahora que es otra vez polvo de estrellas siga brillando y mientras tanto seguirá brillando en mi recuerdo. DEP BERSI